Los resultados del estudio sobre la artrosis de rodilla efectuados por Sandra García-Padilla y cols. demuestran que la combinación de bicarbonato de sodio y gluconato de calcio administrados una vez al mes, directamente en la articulación de la rodilla, produce una reducción muy significativa del dolor y la mejoría de la función física medida con la puntuación total WOMAC y el índice funcional de Lequesne a partir de la primera inyección.
La mejoría experimental se maximiza hasta los 10 – 12 meses; y su efecto beneficioso se mantiene durante al menos 6 meses después de teminar la administración. Sólo cuando se aumenta la dosis de gluconato de calcio, elimina además el estrechamiento del espacio articular. Aunque el posible mecanismo no se conoce en la actualidad, la administración de estas dos sustancias fisiológicas en combinación parecen ser una alternativa altamente eficaz y segura para el tratamiento de la artrosis de rodilla.